En una conferencia mañanera del lunes 7 de agosto en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) respondió a la resolución del Instituto Nacional Electoral (INE), en la que se le ordenó abstenerse de hacer comentarios sobre Xóchitl Gálvez. AMLO aseguró que sus palabras fueron alteradas y, como consecuencia, amagó con un desafuero para los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
El mandatario expresó su indignación frente a la acusación de violencia política de género y denunció que los integrantes del Tribunal Electoral mienten y calumnian. «Los exhibe porque son capaces hasta de alterar mis expresiones, mis palabras», enfatizó AMLO.
Enfocado en la necesidad de una selección justa, AMLO planteó que los integrantes del Tribunal Electoral deberían ser elegidos por el pueblo en lugar de los partidos o la «mafia del poder económico y del poder político».
Tras la medida del Tribunal Electoral, el presidente declaró que no volverá a mencionar ni hablar del nombre de Xóchitl Gálvez en sus futuras mañaneras. Aunque se le preguntó si acataría la resolución, AMLO afirmó que no tomará acciones legales contra ella y que ha decidido no pronunciar su nombre nuevamente.
En respuesta a las declaraciones del mandatario, se compartieron imágenes comparativas que demostraron cómo el Tribunal Electoral modificó las palabras de AMLO durante el análisis que derivó en la resolución por violencia de género contra Xóchitl Gálvez.
Con esta postura, el presidente López Obrador rechaza las acusaciones en su contra y deja claro su descontento con el proceder del Tribunal Electoral, sin recurrir a medidas legales para «desaforarlos».