El presidente Andrés Manuel López Obrador respondió a las protestas de un grupo de productores en Sinaloa que demandan aumentar los precios de garantía, dejando claro que no cederán ante chantajes. Incluso si mantienen tomado el aeropuerto de Culiacán, el gobierno no aceptará las condiciones exigidas, que incluyen destinar 15 mil millones de pesos como subsidio para los grandes productores.
López Obrador afirmó que se está atendiendo a los productores como nunca antes se había hecho. Sin embargo, destacó que este movimiento es impulsado por adversarios suyos pertenecientes a un partido político y a una organización de productores de élite que antes eran los principales beneficiarios de los subsidios agrícolas. En contraste, la política actual prioriza a los pequeños productores, ejidatarios, comuneros y pequeños propietarios, quienes tienen garantizados precios justos y se les compra al precio de garantía.
En conferencia, el presidente aseguró que se están entregando fertilizantes gratuitos a todos los productores, pero en el caso de los subsidios, se canalizarán hacia los pequeños productores, ejidatarios e indígenas que posean parcelas de hasta 20 hectáreas.
López Obrador detalló que si bien los precios están disminuyendo, los precios de garantía se mantienen. Sin embargo, los grandes productores acostumbrados a recibir subsidios quieren que se les subsidie a ellos, lo cual no es posible. En Sinaloa, además de comprar a siete mil pesos por tonelada a los productores, se han comprometido a comprar 1.5 millones de toneladas a ese precio, incluso de aquellos que producen en parcelas de veinte hectáreas o menos, y se les están proporcionando fertilizantes.
El presidente cuestionó el hecho de que doscientos grandes productores con miles de hectáreas quieran recibir subsidios. Ante la pregunta directa sobre si se accederá a su demanda de destinar 15 mil millones de pesos para aumentar los precios de garantía, enfatizó que eso no sucederá. Hasta el momento, se han canalizado ocho mil millones de pesos en subsidios para los pequeños productores, lo cual se hace por justicia. Sin embargo, los grandes productores no lo ven con buenos ojos y se han acostumbrado mal, pensando como antes, cuando bloquear una carretera daba resultados debido a la corrupción de los presidentes y secretarios.
López Obrador dejó en claro que el tomar bodegas no resuelve el problema y mencionó que el bloque conservador está involucrado en estas acciones en Sinaloa. Afirmó que los tiene bien controlados y que están desesperados por afectar la transformación del país. Todos ellos pertenecen a partidos políticos.